En plena Segunda Guerra Mundial, el dramaturgo y compositor Noël
Coward, amigo de Lord Louis Mountbatten, se inspiró en la
experiencia personal de éste y el hundimiento del HMS Kelly para
llevar a cabo un proyecto muy personal en el que asumió las tareas de productor, guionista, director, intérprete y músico. Esfuerzo que le reportó un Oscar Honorífico en 1942. Al ser la primera vez que iba a dirigir una película contó con la ayuda de un reconocido editor que de este modo debutó, también, como realizador: David Lean. Coward
y Lean volverían a colaborar en otras tres ocasiones: “La vida manda”,
“Un espíritu burlón” y “Breve encuentro”.
El hundimiento del HMS Torrin, durante la batalla de Creta, obliga a su tripulación a utilizar las lanchas de salvamento. Empezando por su
capitán, E.V. Kinross, los ocupantes de una de las lanchas, van relatando sus recuerdos asociados al destructor desde que en el verano de 1939, los aires de guerra aconsejan tener los buques preparados para lo que pueda acaecer.
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